Otoño – Epoca de alergias
En ABRIL, algunas plantas y árboles comienzan sus ciclos de floración y el polen que liberan es responsable de reacciones alérgicas.
La alergia al polen es una de las más comunes entre los pacientes alérgicos, pero dentro de este grupo, se pueden tener síntomas a lo largo de todo el año o en un período de tiempo específico. Esta diferencia depende única y exclusivamente de la presencia del alérgeno: si los síntomas aparecen durante todo el año es debido a que el alérgeno está en el ambiente durante todo ese periodo de tiempo. En el caso de las alergias estacionales, los síntomas aparecen cuando el alérgeno se encuentra en altas concentraciones en el ambiente y es dependiente de los ciclos de floración de las plantas.
El polen aparece durante el ciclo de floración
El ciclo de floración de las plantas es aquel por el cual la planta comienza los procesos necesarios para reproducirse y que podemos simplificar como “la aparición de flores”. El período de floración depende de varios factores internos, que son característicos de cada especie de planta y que están coordinados por hormonas. Las hormonas se encargan de mandar señales y comprobar si la planta tiene los nutrientes y energía suficiente para fabricar las estructuras florales. Sin embargo, también existe factores externos. Se trata del conjunto de estímulos del medioambiente que también pueden condicionar el inicio de la floración, como la temperatura, humedad o luz solar. Si todos los factores internos y externos dan luz verde, la planta comienza a producir sus flores.
El polen es una de las partes de las flores, y su función principal no es causar alergias, sino llevar a cabo la propagación de su especie al distribuirse en el aire para la germinación y posterior fecundación. Una vez el óvulo que está esperando en el interior de la flor es fecundado, da lugar a las semillas del fruto que genera una nueva planta. El problema aparece cuando algunas personas tienen una reacción exagerada a la presencia del polen en el aire, el cual, no es dañino ni debería perjudicar a los humanos en su proceso de polinización.
¿Qué polen aparece en abril?
Cada especie de planta tiene una ventana de floración estimada en una época concreta del año que puede variar según las condiciones climáticas. Sin embargo, existen unos calendarios de polen que nos pueden ayudar a tener una predicción aproximada y servir de ayuda a las personas que sufren alergias estacionales a tipos concretos de polen. En este mes de abril, entran en floración los siguientes tipos de árboles: abedul (Betula), fresno (Fraxinus), roble (Quercus), morera (Morus), palmera (Palmaceae), pino (Pinus) y plátano de sombra (Platanus), entre otros.
Los tipos de árboles mencionados comienzan su floración durante este mes (siempre y cuando las condiciones climáticas sean adecuadas), y su ciclo de polinización suele ser relativamente corto. Es posible que, a finales de mes, las personas alérgicas a este polen ya no presenten síntomas porque la cantidad de polen en el aire sea muy baja. Un factor muy importante es la localización geográfica, ya que algunas especies de plantas son más abundantes o están totalmente ausentes en regiones específicas. En el caso de las Islas Canarias, el mes de abril trae la floración de las siguientes especies de plantas: artemisa (Artemisia), ricino (Ricinus), y eucalipto (Eucalyptus).
Sin embargo, hay otras especies de plantas cuyo ciclo de floración y/o polinización comenzó hace semanas y que siguen liberando altas concentraciones de polen al ambiente. Entre ellas encontramos el llantén (Plantago), las gramíneas (Gramineae), el álamo o chopo (Populus), las coníferas (Cupresaceae) y las urticáceas (Urticaceae).
Las personas que tienen alergia al polen de alguno de estos árboles deben tener especial precaución al salir a la calle o practicar actividades en exteriores. La cantidad de polen en el aire puede aumentar de un día para otro y provocar síntomas rápidos.
Un aspecto positivo del mes de abril es que (en algunas zonas) sigue siendo época de lluvias, y esto ayuda a rebajar el nivel de polen en el ambiente, porque la humedad puede hidratar los granos de polen de forma parcial y caerán con mayor rapidez al suelo por un aumento en su peso. Así, si hay lluvias, puede que los síntomas no sean tan graves y sea más seguro para las personas alérgicas pasear por la calle o realizar deporte en exteriores.
Si eres una persona alérgica a alguna de estas especies de plantas, es recomendable que compruebes si dispones del tratamiento que suelas utilizar para controlar o prevenir los síntomas. Los síntomas más frecuentes para este tipo de alergia son rinitis, conjuntivitis y asma. Por eso, antihistamínicos orales, descongestionante nasal, gotas para los ojos y el inhalador son tus mejores aliados. No hay que olvidar que los medicamentos tienen fecha de caducidad, y aunque te hayan sobrado del año anterior, lo mejor es comprobar que además de tener suficiente cantidad para cuando empiecen los síntomas, que no estén caducados. En el caso en que necesites abastecer tu botiquín, tu médico de cabecera y a veces en la misma farmacia te podrán recomendar el adecuado.
La floración puede ocurrir de un día para otro sin pedir permiso. Lo más importante es estar preparado y tomar las medidas necesarias para poder controlar los síntomas en el momento en que aparezca y no causen problemas graves. Y recuerda que, si tienes cualquier duda sobre tu alergia, lo mejor es consultar con un especialista antes de tomar cualquier medicamento.